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¡¡¡Pasen y vean, toquen, escuchen, huelan y saboreen!!!

No le cobraremos su dinero,
su valor a estas alturas ya es escaso
y para cobrarnos lo que vale nuestro espectáculo
debemos pedirle otro tipo de remuneración... Solamente le pediremos sus sentimientos,
los que más le molesten,
aquellos de los que al menos una vez al día desearía deshacerse.

Usted se sentirá aliviado,
nosotros recompensados
y podrá comenzar la función.

Quizá le tenga cariño a esos sentimientos,
o crea que haberlos llorado los hacen más suyos,
que se han convertido en su compañía...
o cómo a veces nos ocurre a nosotros,
que aun hay algunos por comprender.
No se obsesione,
ser feliz es mucho más simple,
pero desgraciadamente parece ser un secreto.

Le ofrecemos la oportunidad de mirarse la palma de las manos,

...si así lo desea.

Le revelamos un pequeño secreto...
respirar es el mayor placer y se lo va a demostrar usted mismo.

Si quiere huir esta es su oportunidad...
Entre y disfrute,

¡lo hemos preparado todo a su medida!