pErDIdo

Hoy la luna es del color de tu vientre, hoy, mis manos se pierden por tu espalda y yo, sonriendo, las veo ir sin despedirse de mi. Quédatelas.

Hoy a tu sonrisa le rebosan tiernos besos, que embelesan mi tacto, cambian el ritmo de mis latidos, y vuelven las palabras melosos susurros sólo perceptibles para tu piel erizándose a mi paso. ¿Qué voy a hacer sin manos?

Hoy el sol brilla en tu balcón, como el recuerdo de tus ojos cerrados por un beso, "heso". Irresistible impulso por abrazarte en estas calles de aceras estrechas, de esquinas cómplices, de nuevos bares descubiertos por tu mano. ¿Viste pasar por aquí las mias?

Me sobran todas las drogas con la nicotina de tus labios, me sobra el mundo enredando caricias en tu cuello. Te envuelvo en esta ensoñación, esta noche, me refugio en tus brazos para dejar la lluvia pasar de largo.


Quédate mis manos, yo ya estoy perdido.